Un tornado de algodón de azúcar, panditas asesinos, manzanas envenenadas. oreos, lunetas y demás golosinas que acaban de golpe con la vida de bellas mujeres. Eso existe en el mundo de Daniela Edburg, una fotógrafa que crea escenas llenas de color en un ambiente retro y femenino, pero que muestran la muerte. Una muerte producto del encuentro con lo cotidiano, con lo que ofrece el mercado y que muchas veces nos esclaviza, hablo más por las mujeres en general.
Esa es una descripción un poco clavada de la obra de Daniela, que sin profundizar demasiado, sólo muestra bellas imágenes, que contrastan lo dulce y colorido con el terror y la muerte. Yo creo que por eso son fascinantes, por ejemplo, la primera vez que yo vi la pieza de nombre Death by cotton candy, me encanto. Una enorme nube de algodón de azúcar , una carretera con pastizales y flores y una mujer lindamente vestida corriendo.
Podría ser la imagen de un sueño perfecto, pero en realidad la masa rosa es un tornado y la mujer del vestido romántico y botas corre por su vida, aunque sabe que va a morir en manos de un tornado de la golosina más azucarada.
He ahí la maravilla, realmente soy muy fan del trabajo de esta artista, que constrye imágenes que mezclan lo cotidiano con la fantasia màs golosa y fatal. Por eso me gusta y más porque en sus fotografías se encuentran elementos deliciosos, productos de belleza, colores fuertes, en fin, escenas casi cursis, pero que dejan de serlo cuando entiendes el significado de la foto.
La amo, visiten su página http://www.danielaedburg.net
No se la pierdan y les dejo una probadita.
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